Tanto para tan poco

Llegué con mis nuevas amigas a la puerta de Extranjería a las 15.20 y ya iban por el 30!!! Ay mamita querida!
Se me llenó la panza de nervios, por miedo a que me faltara algo o que el asesor de mi jefe (un idiota) hubiera hecho algo mal.

Cuando el cana de la puerta dijo 62, 63, 64 pasamos con una sonrisa 3D en los labios.
Adentro de la oficina estaba todo organizado tipo cinta de producción.
Nos sentaban en una fila de sillas y teníamos que ir corriendo el culo a la de al lado cada vez que se vaciaba la primera. Te llamaban desde alguna de las mesas, miraban los papeles, consultaban noseque en el ordenador, recortaban tu caripela de la foto carnet con un recortacaripelas (mierda! no se va a ver la remera celeste y blanca que me había puesto para la ocasión) la pegaban en unos cartoncitos, te hacían firmar, te daban un papel para ir -el 9/8 en mi caso- a retirar la tarjeta, te mandaban a otra mesa donde un cachondo mental te tomaba la huella, te mandaba a una salita con papelitos limpiadedo y fin del trámite. Eran las 15:38.

Igual que un polvo con un eyaculador precoz, cuando me quise dar cuenta ya había acabado.