miércoles, agosto 1

En este blog

donde las bocas y los besos son fundamentales, no podía faltar esta morsa que conocí en el Oceanografic que no paraba de "besar" el vidrio.



La argentina que se escucha al final no era ni Lu, ni yo. Ni Cande.
Lo que demuestra que somos una plaga.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

¿Y no te encontraste a nadie de Elche allí? Dicen las malas lenguas que los de Elche queremos dominar el mundo y que estamos en todos lados.

Anónimo dijo...

Ternurita!

Anónimo dijo...

Lo mejor son esos dos monstruos enormes que pasan por atras nadando boca arriba con cara de "nadar asi es lo mas natural del mundo"

Sublime